lunes, 2 de octubre de 2017

¿Qué es el Coaching Maternal?

Hace 5 años ya que supe que sería mamá por primera vez. Llevaba solo unos meses certificada como Coach Ontológico y ya mi vida había sufrido varios cambios importantes durante mi formación (sí, para ser coach hay que sumergirse primero en uno mismo para luego poder acompañar a otros), lo que no me imaginaba es que mi vida daría un nuevo vuelco, y es que lo que comencé a vivir estaba lejos de lo que alguna vez me había imaginado que era la maternidad, o específicamente, estar embarazada.
Lo primero que experimenté fue miedo, miedo a que le pasara algo a mi pequeño porotito, ya no me atrevía ni a cruzar la calle sin mirar varias veces, sentía la imperante necesidad de protegerlo, comencé a sentirme absolutamente responsable de cualquier cosa que pudiera sucederle. Ser mamá se volvió todo un desafío. 
Luego vinieron los cambios físicos, los primeros meses lo pasé pésimo, bajé casi 10 kilos porque no había cosa que mi estómago resistiera, simplemente no podía comer. Luego ya empecé a pasarlo bien, me sentía preciosa, como en las nubes, era yo la mismísima afrodita, me creía la reina de la vida! Los últimos meses nuevamente me sentí algo incómoda, pero porque se vio afectado mi nervio ciático y me costaba caminar.
En el camino, me fui imaginando todo, cómo sería el parto, mi lactancia, ese bebé precioso y perfecto, me imaginé tantas cosas! Leí sobre partos, lo que era mejor para mi bebé, quería un parto vaginal con apego temprano, quería por supuesto lactancia materna exclusiva y todo aquello que ayudara a tener un buen apego con mi bebé.
Pero la realidad fue tan diferente, me encontré con mil obstáculos y todo lo que había imaginado de mi maravillosa maternidad se había venido abajo.
Lo pasé mal, tengo que reconocerlo, pero después de darle varias vueltas, enfrentarme a una cesárea muy necesaria, a una lactancia mixta, a la incertidumbre de si mi hijo estaba bien o no, de todo lo que leía y los horribles juicios de otras mujeres que hablaban mal de las cesáreas, del relleno, que si no dormías con la guagua, que si no porteabas, entre otro sin fin de cosas… y ya no sólo había tenido que enfrentarme a una realidad que no esperaba, sino que además debía leer toda esa lluvia de críticas de otras mamás!
Entonces dije NO MÁS! Y le di una vuelta a esta increíble situación que estaba viviendo y tomé todos estos aprendizajes y me decidí a utilizar mi profesión como una herramienta de apoyo para otras mamás. Fue así que nació la idea de hacer Coaching Maternal, es decir, un acompañamiento en el proceso de cambio de una mujer al convertirse en madre.
No todas las maternidades son iguales, y no existe (a mi juicio) una maternidad perfecta o ideal, porque eso sería asumir que el resto de las maternidades son imperfectas o están equivocadas.
Soy una convencida de que cada mujer debe encontrar su propia forma de maternar, su propio estilo de crianza, empoderarse para poder llevar a cabo sus ideas, poder defender sus ideales y sostener sus argumentos ante otros que puedan pensar diferente y que quieran imponer ideas antiguas o que no le hacen sentido a esta nueva familia.
Para mí, el Coaching Maternal es una forma de apoyar a la mujer en todo el proceso de enfrentarse no sólo a los cambios físicos, sino a los emocionales y mentales, porque ser mamá cambia todo! Cambia tu cuerpo que ya no es tuyo, sino que está al servicio de tu bebé, cambian tus prioridades, que ahora se enfocan en el bebé, cambian tus horarios, cambia tu forma de alimentarte, cambia la forma de relacionarte con otros, cambian tus emociones, cambia tu forma de ver a los niños, cambia tu relación de pareja, y por supuesto, nosotras mismas cambiamos.
Nadie nos prepara para la realidad que significa ser mamás, y aunque el Coaching Maternal tampoco lo hará, si es una forma de encontrarte a ti misma en esta nueva forma de vida, te ayudará a verte a ti misma con unos nuevos ojos, podrás entender tu propia niñez, podrás encontrar nuevas herramientas en ti misma, podrás fortalecerte y podrás sacar una mejor versión de ti misma.
Te invito entonces a Re-Conocerte a través de este servicio, pensado desde una Mamá, para otra Mamá.
Biendenidas!

No hay comentarios:

Publicar un comentario